El espectáculo diario del ministro de Salud se supera cada vez más. Este lunes, el escuincle doctor recordó el día mundial sin fumar, a sus amigas del whatsapp e Instagram e, incluso, lloró un poco. Todo, mientras el desastre sanitario provocado por el gobierno queda al descubierto. Ya no es chistoso. Urgen medidas urgentes para detener y revertir la catástrofe.

Por el Fin al bloqueo, en solidaridad con Cuba, y con el sueño de Martí, pobladores se manifestaron en la ciudad de Concepción, este lunes 31 de mayo.

Otra gota rebalsó el vaso. El Colegio Médico se retira de la Mesa Social. En la declaración difundida, señalan las razones. ¿Pa’ que quedarnos, si ni nos pescan? ¿Quién toma las decisiones, entonces? Una Mesa Fantasma. ¿Y quién la dirige? Nada más y nada menos que Piñera. Y él es el principal culpable del estado de catástrofe sanitario en el país. ¡Piñera, culpable!

Dos diputados de la UDI, plantearon al ministro del interior, Rodrigo Delgado, la reintegración del paco que arrojo al río Mapocho a un joven. El argumento es que el joven no fue empujado.

Seis infantes de marina serán formalizados por violaciones a los derechos humanos. Esto ocurrió el 24 de mayo del 2020, en San Pedro de la Paz en contra de un poblador, que fue golpeado y amenazado de que lo podían “hacer desaparecer”.

Está pa` la risa. ¿Dónde está el enemigo interno? Y ahora, ¿quién podrá defendernos? No les falta por qué lloriquear. Hoy la UDI y RN la emprendió contra los ciclistas luego de que sus sedes sufrieran ataques de parte de los furiosos en dos ruedas.

Como las callampas cuando deja de llover, así salió hoy la reacción a las calles colombianas. Salieron con lentes de sol, poleras blancas, jeans, enarbolando banderas y cantando el himno nacional. Sale la reacción a pedir paz y diálogo. Sale ahora que sale el ejército para flanquear sus espaldas. Porque a diferencia del pueblo valiente que sale a enfrentar los cañones, la represión, la brutalidad policial, la reacción es cobarde.

Dirán que es un caso aislado, como si todos los casos de vulneración de los derechos humanos no fueran hechos aislados, pero con un factor común, que lo mandos que dirigen dejan al arbitrio de los subalternos lo que deben hacer. De esta manera, la clase social es un elemento que impera cuando ven al pueblo protestando, al mapuche o a una joven, en ese momento todos son enemigos. El hecho ocurrido en Colipulli, y en muchos lugares de Chile, ejemplifica esto.

El ministro de Educación, Raúl Figueroa, ha intentado por todos los medios posibles volver a la normalidad en las escuelas. Parece un “mono porfiado”, vuelve una y otra vez sobre lo mismo, esta es una de las formas con que el gobierno presiona para hacer andar la máquina económica entre las personas. Es una irresponsabilidad cuando nos encontramos en la cúspide de la pandemia.

“¡Porque el pueblo manda!”, esa es la consigna que gritan pobladores organizados en la Junta de Vecinos de Los Copihues y la Asamblea Territorial Los Copihues de La Florida, quienes iniciaron a mediados de mayo una nueva campaña para la compra al por mayor de papas y cebollas.

Las cifras no bajan. No baja tampoco la histeria de las autoridades, ni baja su inoperancia para enfrentar la situación. Según el último reporte, Chile cuenta con 56 mil y tantos casos activos. Siete de las 10 comunas con más casos están en la Región Metropolitana. Puente Alto es la comuna con más contagios diarios, un poco más de 2 mil.

Las votaciones en la Central Unitaria de Trabajadores han llevado el cambio en la dirigencia nacional, se va Bárbara Figueroa y asumirá José Manuel Díaz. La dirigencia saliente se caracterizó por negociaciones con el gobierno y el mundo empresarial, lo que llevó a nulos dividendos para los trabajadores.