A sólo dos semanas de las elecciones presidenciales, una masacre remece al Perú. 14 personas, entre ellas dos niños, fueron asesinados en la localidad selvática de San Miguel del Ene, en el departamento de Junín. El ejército culpó del ataque a una de las facciones provenientes de Sendero Luminoso. Nadie cree en esa versión.
El nuevo presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, reemplaza a Lenín Moreno, un mandatario que es reconocido, no por su altura moral, sino por traiciones políticas, represión y un manejo paupérrimo del gobierno. Los auspicios no son los mejores para el nuevo mandatario, que debe hacer frente a una soterrada crisis social y política y, a una patente crisis económica y sanitaria.
A la renuncia, ayer, del negociador de Iván Duque, Miguel Ceballos, hoy el mandatario sumó el despido del director de la Armada del puerto de Buenaventura, Juan Francisco Herrera. En un claro ejercicio de deliberación el vicealmirante Herrera, con ayuda de la policía y la Esmad, el 19 de mayo pasado, incrementó de nivel 1 a 2 la seguridad del puerto. No es chiste dejar como chaleco de mono el principal puerto de Colombia, hay mucho en juego. Duque lo sacó del cargo.
A Miguel Ceballos no le apetece seguir con la papa caliente en las manos. Las movilizaciones del pueblo colombiano no se han desgastado. Muy por el contrario, cada día se suman con fuerza más organizaciones y territorios en el país. Ya van para el mes de paro.
Se suspende el enfrentamiento en Gaza. El régimen de Israel aceptó un cese de los combates “recíproco, simultáneo y sin condiciones”.
Así como aumenta la fuerza del pueblo en la lucha, también lo hace la creatividad. Hoy el Ministro de Defensa colombiano, Diego Molano, ha acudido al guión establecido de “que nos invaden los marcianos” para explicar sobre quién atiza los fuegos en Colombia. Si, algo así como los alienígenas de nuestra Ceci Morel.
Hoy, el Comité Nacional del Paro retomó las negociaciones con el gobierno de Iván Duque. Señalan que hubo buen ánimo, pero no es más que eso. Anuncian que no se bajará el paro mientras el gobierno no de señales concretas al petitorio de la población, entre ellas, el cese de la represión. Y hablando de represión, Colombia vivió una noche de hostigamientos de parte de los Esmad y la Policía Nacional. Así las cosas, Colombia va para un mes de movilizaciones sostenidas.
Por aquí y por allá, la lucha que da el pueblo colombiano va abriendo flancos a su favor. Al menos, así pareciera. Por ejemplo, hoy el Tribunal Supremo de Bogotá ordenó al gobierno a acatar un fallo de la Corte Suprema de 2020 que obliga a la policía a respetar la legitima protesta. Mientras, Amnistía Internacional apuntó a Washington: pide a EE.UU. que no envíe más armas que están siendo utilizadas en la represión. Así, en la pelea, cada día tiene su afán, pero el mayor de los nuestros, que se vayan todos, sigue firme en el pueblo.
“Estamos viviendo el peor momento de la pandemia…y no es momento para especulaciones” señaló hoy el Presidente de Argentina, Alberto Fernández a la par que anunciaba un cierre total de nueve días en todo el país luego de las cifras récord que ha alcanzado la pandemia Covid en estos últimos tres días. Finalmente logró alinear a gobernadores y al alcalde porteño.
Ayer, lo ganaron los patrones. Hoy, el gallito fue para el pueblo movilizado. Duque sufrió una derrota temporal con el retiro de su proyecto para “reformar” el sistema público de salud. Un proyecto que viene a iniciar un proceso de descentralización y participación del sector privado en las prestaciones de salud pública. ¿Nos suena conocido? El retiro del proyecto es parte del petitorio que instaló, desde la calle, el Comité Nacional del Paro para deponer las movilizaciones.
Gran propuesta, dicen los medios. Acuerdo de Salvación Nacional. Guaidó propone medidas para resolver todo. Entre otras cosas propone diálogo y garantías. El diálogo de oficialismo y oposición lleva años dándose en el país. Pues, entonces, ¿un nuevo invento? ¿una medida desesperada para dejar de parecer inútil?
Se abre una nueva crisis entre España y Marruecos. La disputa se realiza por medio de un drama humanitario. 8 mil migrantes de diversos países africanos llegaron al enclave español de Ceuta. Madrid desplegó al ejército para detenerlos y devolverlos a Marruecos.
¡Sí! apagando el fuego con bencina. Recién este lunes se sentarían a negociar “una tregua” con el Comité Nacional del Paro. Sin embargo, la orden de Duque de desplegar “la máxima capacidad operacional” para desbloquear las rutas tomadas desde el 28 de abril no ayuda a la convocatoria. Es bien cierto que no se puede estar con dios y el diablo a la vez. Esta vez, los gremios ganan el gallito, pero el país entero sigue en las calles. Se acercan días de coraje para el pueblo colombiano, pero el régimen, también como acá, va en caída libre.
Los últimos días las muestras de solidaridad con Palestina, a través de manifestaciones en todo el mundo, han sido numerosas. Un hecho especial, es la solidaridad que han dado mandatarios a Israel, sin siquiera considerar que es el provocador del conflicto.