Israel y los palestinos están en un enfrentamiento que lleva décadas entre el ejército hebreo y un conjunto de organizaciones. En la jerga militar estadounidense esto denomina “conflicto de baja intensidad”. Después de la ofensiva palestina del 7 de octubre en Gaza, ya no es posible usar ese eufemismo.
No “esa” inflación; la otra. Contrario a las encuestas y las expectativas de una victoria en primera vuelta, la inflación del “fenómeno Milei” perdió aire y quedó en segundo lugar, tras el abanderado peronista, Sergio Massa.
El ataque a un hospital en Gaza dejó centenares de muertos y devela el carácter de la guerra que Israel pretende librar en contra de la resistencia palestina. La matanza provocó repudio y movilizaciones en todo el mundo. Mientras, Gaza se prepara para nuevos ataques israelíes.
A pesar del shock y la sorpresa, el gobierno israelí no lo dudó. Inmediatamente calificó el ataque palestino desde Gaza como una “guerra”. El régimen israelí llama a todo acto de resistencia en su contra “terrorismo”. Por eso, el uso del término es algo nuevo. Pero todo indica que, esta vez, tienen razón.
Un vasto movimiento de milicianos palestinos, por aire, mar y tierra, rompió el bloqueo a Gaza y sorprendió a las fuerzas israelíes en los contornos de la franja. La “tormenta de Al Aqsa” tomó desprevenido al régimen israelí, que declaró un estado de guerra en contra de los israelíes.
La campaña de verano de la OTAN en Ucrania se acerca a su fin, Las fuerzas ucranianas están lejos de conseguir sus objetivos. Pero eso no significa que se abra la perspectiva del fin de la guerra. A pesar de todo, las potencias occidentales parecen decididas a mantener vivo el conflicto, con más envíos de armas, material y dinero.
Ante la pasividad del gobierno de Armenia, tropas de Azerbaiyán atacaron la región de Nagorno Karabaj. La disputa real involucra a más potencias y es un eslabón más de una larga cadena bélica.
Le dieron 48 hora para que hiciera las maletas, pero el diplomático dice que se va a quedar, nomás. Más que el embajador, es la fuerza militar neocolonial francesa la quiere seguir en Níger, el país africano que pretende romper con el tutelaje europeo.
Yevgueni Prigozhin el fundador del grupo Wagner murió en un accidente de aviación cuando se trasladaba de Moscú a San Petersburgo en Rusia.
El grupo que reúne a Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica ha decidido ampliarse en su reunión convocada en Johannesburgo, desde el 1º de enero del 2014 serán 11 los miembros permanentes.