En Colombia, las organizaciones indígenas luchan junto a todo el pueblo. Miles de personas, organizadas en guardias indígenas, se desplazaron a las grandes ciudades para apoyar al pueblo en su defensa.
También en Madrid y Barcelona. El apoyo al pueblo colombiano no cesa, lo mismo que el rechazo contra Duque, su policía y la régimen político. Al tibio intento que asomó la nariz para negociar la salida a la crisis, el tozudo pueblo no deja la calle.