Hoy muy temprano los trabajadores subcontratados de Enap volvieron a las calles en Hualpén. No queda de otra, no hay voluntad de la gerencia, ni del gobierno de llegar a acuerdo con los trabajadores externalizados. Trabajadores que realizan labores fundamentales para la empresa pero son tratados como de segunda categoría. La movilización continúa.
Es la tercera semana consecutiva de movilización. Hace frío por las mañanas en el sur, de hecho, está escarchando. Y qué mejor para pasar el hielo de las mañanas que una buena barricada. Así partió esta mañana, con fuego en las calles.
Fueron cientos de trabajadores nuevamente en las calles de Hualpén. Representan a 12 empresas que blanquean la relación laboral para le estatal. El modus operandi para saltarse las leyes laborales, para pagar menos, explotar lo mismo y abusar demás.
Hace una semana, el gobierno les tiró a los pacos, mientras, a esas mismas horas dialogaban, canapés intermedio, leyes a medida y el compromiso de ponerles a los milicos como guardias de seguridad.
Así están las cosas en el gobierno de los chicagotree. Víctor Sepúlveda, el dirigente y vocero de la movilización denuncio ayer el quiebre de la mesa de trabajo. Esas mesas que parten cojas porque no son más que despistes para alargar una solución que no llegará sino hasta que los trabajadores hagan el punto aparte.
Hasta ahora, luego de la negativa de la gerencia de Enap, más bien, ante la ausencia displicente de su plana mayor en las mesas de trabajo a las que ellos mismos, vía publicidad y prensa, han convocado, no se ha vuelto a establecer una fecha para una negociación.
Por eso, los trabajadores seguirán en las calles.