Los asistentes se convocaron en la Pinacoteca alrededor de las 19:00 horas, lugar en donde realizaron discursos iniciales. Entre los alrededor de 400 asistentes, se escuchaba fuerte las consignas Y gritos por justicia para Manuel Rebolledo y Justicia para Pablo Marchant. Una de las compañeras secundarias asistentes, afirma en su declaración: “Como estudiantes y pobladoras que luchamos y frente al actual proceso de cambio de mando, reaccionamos y salimos a las calles, porque apostamos a construir poder en los territorios, hasta abolir este sistema que nos precariza”, señala en parte de su discurso.

La columna de manifestantes avanzó desde Pinacoteca a Diagonal Biobío , avanzando hasta O’Higgins. En la intersección con Lincoyan comenzaron el regreso, esta vez por Barros Arana. Durante el trayecto se escuchaba fuerte y claro la consigna “Dónde está, todo lo prometido, los presos en la cárcel y el pueblo empobrecido”. Haciendo alusión a todos aquellos que aún están presos por luchar y a las alzas que golpean a diario los bolsillos de las familias trabajadoras.

El regreso de la columna se acompañó de fuego en a lo menos tres intersecciones, para cortar el tránsito. La última fogata se encendió simbólicamente en la esquina de plaza de la Independencia a los pies de Leftraru. Lugar en donde se finaliza la marcha con unas palabras de las organizaciones convocantes.

La repre a horas de asumido Boric.

Roxana, y su hijo menor de edad, una vez finalizada la marcha, avanzaron a tomar la micro, en dirección a Carrera. Antes de llegar a destino fueron interceptados por cuatro Pacos de civil, a cargo del sub teniente Manuel Rojas. Quienes se abalanzan sobre su hijo a quien esposan y lo ponen de rodillas. El paco Rojas comenzó a golpearlo. Su madre que se encontraba rodeada por cuatro pacos de fuerzas especiales, les dice a gritos que lo suelten, que ella es la madre, que tiene sus documentos. En ese mismo momento frena un auto blanco patente JY JB 78, figurando como dueño el Banco Santander – suben al menor y se lo llevan a golpes a pesar de los gritos de la madre, quién insiste en que los lleven juntos.

Parece que los pacos estaban avisados que ese día no se le podía meter ruido al Borito. por que se tiraron con ocho polis de fuerzas especiales, dos motos, un furgón y cuatro pacos de civil, para detener a una madre y su hijo.

En conversación con REVOLUCIÓN Roxana nos relata lo sucedido: “.A mi hijo se lo llevan en el auto de los pacos de civil y a mi me trasladan en el móvil. Al subirme me botaron boca arriba en el furgón, esposada con las manos atrás. Uno de los pacos intentó ponerme la rodilla en pecho para aplastarme. Frente a su acción respondí con patadas y una que otra chuchá y logré zafar de los golpes. Lo continué encarando todo el viaje y otro de los pacos que estaba de pie mirándome hacia abajo, me decía “Mirate como estás tu ahí (botada y esposada) y como estoy yo, aquí” amenazándome. En ningún momento me callé, aunque ellos intentaron doblegarme, intimidarme e infundirme temor”, señala Roxana y continua – “Cuando vi que a mi hijo lo subieron en un auto, de supuestos pacos que no se identifican, sentí temor de que lo golpearan y lo sometieran a vejámenes. No estaba tan equivocada, fue golpeado en la cabeza y el rostro, durante su detención y luego en el traslado. Además de golpearnos e insultarnos a ambos nos pasearon un rato. Llegamos a la comisaria y después nos llevaron a constatar lesiones. Nuestra detención fue a las 08:00 y estuvimos hasta las 11: 30 aproximadamente encerrados.”

“Con este hecho me queda claro que no nos equivocamos, que la represión va a ser siendo igual. Lamentablemente las alzas de los precios, de la comida, de la vida, va a hacer que la gente se movilice y salga a la calle y al parecer la represión va a ser la misma que cuando teníamos a Piñera. Si es que no es peor. Por la debilidad del gobierno” Finaliza para nuestro medio Roxana-

Roxana y su hijo, en el día 1 de Boric, salieron a marchar, ese día fueron detenidos y golpeados, mientras el presidente discurseaba. Ambos fueron trasladados a la 1ra. comisaria por separado. La madre en el furgón, el hijo en el auto de los civiles. Ambos fueron golpeados y maltratados en los vehiculos de traslado. A ambos quisieron aleccionarlos por salir a las calles. Pero a ninguno de los dos lograron intimidarlos, ni doblegarlos. Porque si estaban en esa marcha, era porque se sintieron convocados a exigir justicia por los presos, los muertos y los mutilados, asistieron para denunciar las alzas que empobrecen a las familias y también para señalar que no es el gobierno de turno el que va a cambiar el estado actual de las cosas, sino el pueblo organizado, haciéndose del poder.