No se sabe cuánto es el monto que debía Verónica Pinochet, hija del dictador, en intereses y multas por no pago de contribuciones u otras rentas. Lo que sabemos es que el SII se las condonó toditas por tratarse de una contribuyente ejemplar, así lo hacen por política, se explican.
Verónica Pinochet es la tercera hija del dictador y ex esposa de otro de los trigos mas sucios, Julio Ponce Lerou. La que pasa más piola, o la que lo intenta. Aun así, tan piola no pasó hoy el perdonazo que le hizo el Servicio de Impuestos Internos a los intereses y multas que tenía por, aún no sabemos, qué ítem.
No habrá sido menor, porque estos ladrones no se andaban con chicas. El monto aún se desconoce debido a las exigencias de la Ley de Protección de Datos Personales.
Sin ir más lejos, recordemos el famoso caso Riggs, investigado por la justicia estadounidense, que dio con las cuentas bancarias donde la familia Pinochet tenía millonarios fondos en dólares.
“Si no fuera por Estados Unidos, nadie en Chile se habría percatado de las cuentas ocultas de Augusto Pinochet. El caso se destapó en 2004. Inicialmente se hablaba de 20 millones de dólares. Incluso, en 2009, un reportaje británico señaló hasta 1.600 millones de la divisa estadounidense. Pero en nuestro país sólo partieron por congelar 6 millones de dólares que tenía en el Banco de Chile”, señaló en su oportunidad el periodista Paul J. Richards de la Agencia France-Press a propósito de la investigación.
El hallazgo de las cuentas de la familia ratera fue casual. Tras el ataque terrorista con las Torres Gemelas, en 2001, el Subcomité Permanente de Investigación del Senado de los Estados Unidos se puso a seguir rastros de financiamiento al terrorismo internacional. La investigación apunto desde los inicios a movimientos sospechosos en el Banco Riggs, uno de los más prestigiosos de Washington en aquel entonces.
Así fue como el 14 de julio de 2004 salieron a la luz 125 cuentas secretas que el dictador Augusto Pinochet tenía desde 1994 en dicha entidad financiera. ¡Y zaz! Resulto que además de asesino era ladrón.
“Al final del proceso penal, en 2018, la Corte Suprema ordenó el comiso de 1,6 millones de dólares. Ahora, por la vía civil, el CDE (Consejo de Defensa del Estado) lucha por recuperar 17 millones de dólares en bienes obtenidos ilícitamente por el dictador. Y el SII va a la caza de los impuestos respectivos”.
“El SII va a la casa de los impuestos respectivos”. Que tiempos aquellos, suspirarán los nostálgicos, respecto de estas glorias pasadas. Realmente ¿alguna vez el servicio aquel se dedicó a cazar a los ladrones?. Es que en los últimos años no ha hecho más que blanquear las reiteradas malversaciones cometidas, a diestra y siniestra, por la clase política.
Hoy lo tenemos perdonando multas e intereses a una de las “contribuyentes ejemplares” de la rancia clase política nacional: la tercera y más discreta hija del dictador, Verónica Pinochet.