José Miguel Espinoza no se imagino que cuando estaba dale que dale con su máquina DHL, esas enormes excavadoras que usan en la minería, se le vendría, literalmente, el mundo en encima.

Un derrumbe lo dejó atrapado en el fondo de la mina, a 260 metros de profundidad. Si no fuera porque estaba dentro la cabina cerrada de su máquina, no la cuenta dos veces. Sin embargo, pudo mantener contacto por radio con la superficie.

Los trabajos de rescate, dirigidos por expertos de El Teniente, pudieron, finalmente rescatarlo desde el fonde la mina.

Una suerte increíble.

¿Qué fue lo que pasó? Nadie sabe, nadie dice nada. Según informaciones de prensa, las autoridades informaron que será la propia minera la que investigará el incidente.

Pampa Camarones, la única mina de cobre en la región de Arica y Parinacota estuvo varios años sin operar, luego de que los antiguos dueños -controlados por la coreana Samsung- se declararan en quiebra.

La mina fue adquirida después por el fondo de inversión Larraín Vial que opera en conjunto con la transnacional japonesa Mitsui.