La Corte Marcial en Chile, que ve los casos de los milicos y el resto de los uniformados, está compuesta por dos ministros de la Corte de Apelaciones, por los Auditores Generales de la Fuerza Aérea y Carabineros y por un coronel de Justicia del Ejército, en servicio activo.

En esta corte especial con justicia especial para los milicos, el representante del ejército es Isaías Martínez Castillo. Dicen que era un secreto a voces su cercanía con el ex comandante en jefe del Ejército, Ricardo Martínez, procesado en abril de este año, por fraude al fisco por la módica suma de $44 millones.

Martínez Castillo, el milico y ahora juez ladrón,  fue integrado a la corte marcial en marzo de 2021 a pesar de que existía este antecedente. Antecedente no menor si se considera que en esa fecha, Rutherfod ya investigaba el caso y lo tenía, al Martínez ex comandante ladrón, en la mira. Pero aun así, los demás integrantes de la Corte Marcial no consideraron que fuera un antecedente relevante para inhabilitarlo, aunque el juez ladrón hubiese,  descaradamente, votado a favor de su libertad.

Pero esto llegó a su fin. Porque la ministra en visita que lleva el caso, la discreta Romy Rutherfod, lo comenzó a indagar en calidad de inculpado en la arista “empresas de turismo” del caso Milicogate. Entre otros, la ministra lo investiga por unos viajes a Alemania en comisión de servicio donde habría aprovechado de pegarse unas vacaciones además de unas movidas truchas con devoluciones de dineros.

La ministra fue en extremo discreta en esta investigación. Fue el Consejo de Defensa del Estado, quien soltó la chaucha. La semana pasada se analizaría en la Corte Marcial un recurso interpuesto por la defensa del ex comandante Martínez para revocar su procesamiento pero el CDE presentó una incidencia para que el Martínez  se inhabilitara en la discusión.

Y ahora, lo sabemos todos. Otro ladrón de cuello y corbata y ahora, en la Corte Marcial.

“Resulta evidente que se encuentra legalmente implicado para conocer de la causa, dado que en ella se debaten y discuten idénticos asuntos (viajes) en los cuales él mismo, como ya se ha señalado, se encuentra siendo investigado en calidad de inculpado (…). Por consiguiente, el señor Isaías Martínez Castillo tiene a lo menos interés personal por tener causa pendiente en que se ventila la misma cuestión que el juez debe fallar, lo que naturalmente le resta imparcialidad pues se encuentra siendo investigado por viajes efectuados por él al extranjero”, argumentó el CDE.

Dicen que el Ejercito se va a quedar piola, que no le va a prestar ropa, aunque es su representante en la Corte Marcial. Se dice que no lo pueden sacar, que sólo él se puede inhabilitar.

Para nosotros, que siga o renuncie es como que llueva en Dinamarca. Movidas van, movidas vienen. Y entre éstos, siempre se pueden arreglar los bigotes con una comilona o en su defecto, con un viaje a las Europas. Lo importante es no olvidar -y estos casos son un refresca memoria- de la calaña de personajes con que está montado el régimen.