Leónidas Iza, el dirigente de la Conaie, convocante al paro nacional indefinido en el Ecuador, hace sendos llamados a la paz. Hoy, una multitudinaria convocatoria pacífica en las afueras de la Asamblea Nacional, fue reprimida sin cuartel. La jornada se saldó con dos muertos y un centenar de heridos.
Las víctimas de la represión murieron por el impacto de bombas lacrimógenas disparadas a matar. En los alrededores de la Asamblea Nacional, los miles de congregados, mujeres, niños, ancianos, jóvenes, que se manifestaban de manera pacífica, fueron interrumpidos por el ruido ensordecedor de las bombas lacrimógenas. A esa hora, justo a esa hora, Leónidas Iza hacia un punto de prensa con medios internacionales.
El lugar se convirtió en un campo de batalla y en una batalla campal, donde un pueblo desarmado, llamado a actuar con paz, se defendía de la represión corriendo, aterrado, escondiéndose en entre los árboles, parapetándose en las esquinas, defendiéndose con lo puesto y con lo que podía agarrar en el camino.
Las víctimas mortales de hoy son dos jóvenes. Henry Quezadas, cuyo cuerpo tenía perdigones por doquier y Byron Guatatoca, cuyo cráneo fue pulverizado por una lacrimógena. Los medios han reportado además 90 personas heridas de diversa gravedad, 80 detenidos y un veintena de personas de las que aún no se sabe su paradero.
La muerte de Guatacota ocurrió en la ciudad de Puyo, al este de Quito, hacia la Amazonía. La ciudad está sitiada por los manifestantes. Durante la noche, los movilizados quemaron un cuartel policial y atacaron locales comerciales.
Gary Espinoza, uno de los dirigentes de la Federación Nacional de Organizaciones Campesinas, Indígenas y Negras (Fenocin), señaló a los medios internacionales que sólo buscaban ingresar al edificio de la Asamblea Nacional para pedirle a su presidente, Virgilio Saquicela, que aplicara el numeral 2 del artículo 130 de la Constitución, para que los legisladores “evalúen a Lasso” y se busque “una salida política” al conflicto.
En la misma línea, José Celestino Chumpi, del partido político ligado a la Conaie, el Pachakutik, hizo un llamado “a todos los países latinoamericanos, a todos los organismos internacionales para encontrar una salida pacífica, a la ONU, relator especial de derechos humanos, porque yo no soy partícipe de que haya caos y más muertes”, afirmó.
Así están las cosas en el Ecuador. Guillermo Lasso vino a ofrecer una solución a la crisis de 2019. La Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador logró traer desde las provincias a 15 mil indígenas a la capital, Quito. En la capital el pueblo se ha volcado a las calles porque la lucha no es sólo por “las lenguas” y el Inti Raymi.
La lucha es por el pan, el trabajo y la libertad. La lucha es de todo el pueblo y la paz se alcanzará sólo con la victoria.