Tal como lo adelantamos el lunes en REVOLUCIÓN. ENAP es una empresa pública que actúa con todas las mañas abusivas de las empresas privadas. Contamina y envenena a la gente, externaliza trabajadores, cierra las negociaciones y decide unilateralmente suspender la distribución de combustible, amenazando con dejar de distribuirlo. Esto, a causa de la toma de accesos que habrian mantenido los trabajadores subcontratados de la refinería en Hualpén.

Así lo demostraron con el comunicado emitido hoy por la mañana el que, por una parte apretaba las clavijas al gobierno del Yellow para que reprima y “despeje las inastalaciones” y por otra pretendía desmovilizar a los trabajadores obligándoles a detener la lucha que llevan hasta el día de hoy.

El Boris quien en septiembre del 2021, en plena candidatura firmó un compromiso – perdón- acusó recibo, de las peticiones de los trabajadores subcontratados de ENAP Biobío, ahora se hace el Larry. La Siches, frente al apretón que le dieron desde la empresa, no se escondió esta vez, pero sacó a la pizarra a la Dresdner para que arreglase el asunto señalando: “El transporte del combustible es una cuestión estratégica para nuestro país por lo que se le ha instruido a la delegada presidencial a hacer todas las acciones que están en su poder para lograr mantener el suministro y mantener las vías despejadas de ENAP que es una industria estratégica – y agregó – “Nuestra delegada ha estado en conversaciones con los distintos equipos de trabajadores contratistas que están haciendo sus demandas a ENAP, esperamos que esto tenga una pronta solución pero sin duda nuestro gobierno tiene el deber de asegurar el libre tránsito y obviamente el suministro y abastecimiento para todo el país”

La Dresdner, tomó el guante y cuestionó a la empresa por el comunicado emitido – por el cual la sacan a la pizarra – y señaló que “no es una alarma que sea necesaria, porque estamos trabajando para poder resolver este conflicto y tenemos muchas herramientas sobre la mesa con las que podemos trabajar y podemos asegurar que esto sea de esta forma”.

Mientras el presidente, la ministra, la delegada presidencial y la empresa se pasaban la pelota, los trabajadores claros y firmes en su decisión, declararon que la estrategia desplegada por todos ellos es un intento de criminalización y presión a los trabajadores que siempre han estado dispuestos a dialogar, pero aquí y ahora. No en agosto y sin ofrecer ninguna seguridad formal de que ello ocurra.

Para estos efectos, la FENATRASUB en respuesta a los hechos sucedidos emitió el siguiente comunicado:

A los trabajadores les mueven sus justas demandas, exigen que se modifique el acuerdo marco que tenían suscrito con el Estado, el cual se matiene congelado desde el año 2017, además de ser tratados en igualdad de condiciones porque su trabajo, al igual que el de cualquier trabajador, es vital para la empresa.

El vocero de Fenatrasub, expresó que “La medida de la compañía es para evitar sentarse en una mesa de trabajo que modifique nuestro acuerdo marco que se mantienen congelado. Ellos no tienen voluntad de conversar. Están obstinados”- afirmó- “Nosotros queremos mejorar los anexos laborales, mejorar la calidad de la salud de los viejos y tener una cobertura de seguros para mejorar su protección. Hay muchos trabajadores que han partido de la refinería sin un seguro de protección en salud. Mejorar la calidad de los beneficios de escolaridad, de aguinaldos, vacaciones, etc. La brecha entre los trabajadores subcontratados y los de planta es muy grande y nosotros buscamos acortarla”, concluía el dirigente.

Al cierre de nuestra edición, no había claridad respecto del camino que seguirá el conflicto entre Enap y los trabajadores.