Aníbal Antonio Villarroel Rojas fue asesinado de un disparo, en ese momento se desconocía quién había percutado el arma. Según testigos había sido carabineros que reprimió la manifestación e hizo uso de armas en contra de las personas, lo que fue desmentido por ellos.
La información que se tiene hoy, es que el fiscal del caso Christian Toledo sabía desde diciembre del 2020 quien había disparado y hasta hoy día no ha hecho nada para formalizarlo. Tenía la bala percutada y las cámaras que utilizaron los carabineros ese día.
El asesino es el teniente de carabineros Joaquín Muñoz Vásquez, de la 28º comisaría COP oeste. Habría disparado hacia personas que se manifestaban en la población La Victoria, comuna de Pedro Aguirre Cerda, impactando a Aníbal Villarroel en el tórax y a su amigo, Bastián Salamanca en el talón derecho. El laboratorio de criminalística de la policía de Investigaciones hizo las pericias a las balas y concluyeron que había sido percutada por la pistola marca Taurus modelo PT-917, calibre 9 milímetros, del teniente Joaquín Muñoz y procedieron a confiscarla.
Conociendo todos estos antecedentes sobre el crimen, la justicia no ha hecho nada, habiendo querellas por el delito de homicidio presentada por el municipio de Lo Espejo, de donde era residente Aníbal Villarroel. En ese entonces, el ministro del interior, Víctor Pérez respaldando el actuar de carabineros ese día y con el fin de plantear que había sido un ataque hacia ellos, planteó que “carabineros se tuvo que defender”, aún cuando testigos aseguran que dispararon sin que hubiese agresión de los manifestantes.
Parece que no solo debe disolverse a los carabineros, que operan como si fueran una organización delictual, cometiendo crímenes, sino que también todo el entramado de la justicia chilena está en entredicho, pues funcionan de manera política, clasista y oportunista, ocultando y retrasando casos, favoreciendo y liberando a quienes estiman hacerlo, y siendo partícipe de los lineamientos políticos de sus jueces. En este caso, el fiscal actúa protegiendo al funcionario de carabineros y con ello, evita que se haga justicia, avalando el uso de la fuerza y el asesinato.