Lo llenaron de epítetos poco amables, de lado y lado y por todos lados. Fue necesario que el periodista estrella de Luksic fuera a pasar frío a la frontera polaca-ucraniana como “reportero de guerra” para quedar expuesto en lo que es: un servil pusilánime de los intereses patronales. Una pequeña venganza de las redes sociales nunca está demás.
Cada mañana en Teletrece Radio, Iván Valenzuela nos depara con un programa de actualidad política nacional. El periodista, con su facha impecable y su hablar post-universitario posa de ecuánime y profesional. O eso cree. Pero desde hace bastante tiempo, fondeado en los mejores puestos de los medios de comunicación, ha venido exacerbando su tono reaccionario.
No es el único reaccionario que tiene a su entera disposición un micrófono altisonante para burlarse del pueblo, sus necesidades y sus luchas y para encubrir la canallada permanente del régimen. ¡No! Pero Iván es un tanto especial.
Por ejemplo, tenemos a Tomás Mosciatti, en un medio bastante más masivo, si queremos adjetivar, hace lo mismo, pero al menos es directo, explícito. Defiende el orden, la militarización contra los mapuche, se escandaliza con la movilización social “violenta” y con la corrupción, aunque sobre esto último nunca se quema con un nombre. Mosciatti grita en su show de las tardes, como el payaso principal de un circo con el nombre de su familia.
Pero Valenzuela mantiene siempre siempre un tono muy nice, educado, medido, inalterable.
Podemos compararlo con la Consu. Consuelo Saavedra, la periodista que hace mucho dejó atrás sus pecados de juventud para, en un maridaje -un ex ministro de Hacienda- acorde a su corte de pelo hipster, fruncida total nos recuerda cada mañana en radio Duna, dónde está la alta sociedad y lo que piensa. Pero Valenzuela no, él pasa piola. Eso cree.
También podríamos ponerlo al lado del histérico de Matías del Río, que no mueve un músculo para esconder su conservadurismo reaccionario y golpista. Pero del Río es un caso sin comparación.
Iván anda por la vida de periodista de alto vuelo. Sus uñas bien cuidadas, sus trajes impecables, ni tan llamativos ni demasiado sobrios, su pelo arreglado con cuidado milimétrico. Listo para cualquier pantalla en el extranjero. En esas anda Iván, pasando piola. O eso cree.
Sabemos que “los medios” están poblados de periodistas serviles y corruptos. Un día de estos nos enteraremos, por ejemplo, con cuántos de ellos tuvo tratos el Ejército. Parte de los fondos robados por los altos mandos para gastos reservados se usaron para mojar a periodistas.
Pero las redes, ¡ay las redes! Hoy lo bajaron a Iván Valenzuela del volantín encumbrado en el que andaba. Y cayó de hocico. Le dieron, desde la fanaticada de su sector, la derecha, y de todos lados.
En estas letras faltan epítetos, pero sobra el desprecio por esta calaña de sujetos. Dejemos a las redes hacer lo suyo.
“Se sabe que los fachos y sus 9 hijos no comen chocapic, si no que chupapic y terminan como Iván Valenzuela o Matías del Río chuchetumare.”
“Imbéciles, la guerra es en Ucrania, no en Polonia, ridículo el Iván Valenzuela, denle un guatero y tápenlo con diario.”
“Iván Valenzuela posa como corresponsal de guerra y parece una veterana friolenta.”
“El pusilánime siervo estrella de Luksic, se ve francamente penoso”
“Canal 13 mando a su contingente pinochetista a Rusia: Iván Valenzuela y a Alfonso Concha. Sólo faltaron los corneteros y fachos de Polito Ramírez y Emilio Sutherland”.
“Iván Valenzuela y Alfonso Concha están en la frontera de Polonia con Ucrania, les vamos a creer. Es como si estuvieran en Plaza de Armas de Santiago reporteando lo que pasa en Valdivia.”
“Lord Putin: deje a Iván Valenzuela por allá. Gracias y namasté”.
“Para todos los que están molestos por el reportaje de Iván Valenzuela , solo quiero decir, en su favor, que estaba en Europa, por vacaciones. Seguramente, sus empleadores le pidieron twittear desde allá”.
“El desagradable de Iván Valenzuela esta reportando desde la Antártica ?????“
“Alguna vez viste a Ivan Valenzuela reporteando sobre la guerra en Plaza Dignidad y las violaciones a los DDHH por parte del Gobierno de Chile?”
En fin.