Las masivas movilizaciones por el alza en los precios del gas en Kazajistán – el inmenso país centroasiático- comenzaron el 2 de enero al sur oeste, en el pueblo petrolero de Janaozen. Hoy el gobierno kazajo declaró Estado de Sitio hasta el día 19 de enero.
Janaozen es un importante pueblo petrolero fundado en 1968, en Kazajistán. El país es enorme, el noveno más grande del mundo y tiene importantes reservas de petróleo, gas y minerales. Pero aún así, el precio del gas en este crudo invierno, se disparó hasta sacar a la gente a las calles a enfrentarse con la policía.
El presidente del país, Kasim-Yomart Tokáev, declaró este Martes, Estado de sitio en la ciudad de Almatý y la provincia de Mangystau a partir de la 01:30 del 5 de enero hasta las 00:00 del 19 de enero.
La medida, señalan los medios, se tomó en vista del “agravamiento de la situación, con el fin de garantizar la seguridad pública, restablecer el orden público y proteger los derechos y libertades de los ciudadanos”.
Hoy martes, miles de personas salieron a las calles en una de las ciudades más grandes del país. Se enfrentaron con la policía que reprimió con gas lacrimógeno, granadas aturdidoras y de humo para dispersarlos. Los movilizados quemaron carros policiales.
El gobierno ya se comprometió a bajar el precio de los combustibles, que subieron a partir del 1 de enero, pero el anuncio no ha servido para bajar el nivel y la magnitud de las protestas, que comenzaron con el alza del gas y han derivado en otras políticas y sociales.
El movimiento se extendió rápidamente hacia la ciudad de Aktau, la ciudad que ha sido en el pasado “el escenario de los disturbios más mortíferos del país desde su independencia de la Unión Soviética en 1991. En 2011, al menos 14 trabajadores de una planta petrolera murieron cuando la policía reprimió una protesta para pedir una mejora de las condiciones laborales y salariales” informan las agencias de prensa.