El asesinato de Alex Lemún

A los 17 años muchos jóvenes piensan en ir a la universidad, en trabajar, en pololear o en vivir la vida. Algunos ni siquiera saben lo que harán. Hay otros que, a esa edad, saben exactamente lo que deben hacer, saben que deben luchar e incluso morir por lo que murieron muchos otros antes que ellos. Alex Lemún, un estudiante de secundaria se convirtió en weichafe para proteger a los suyos.

Edmundo Alex Lemún Saavedra tenía 17 años de edad, cuando fue asesinado por la espalda por el mayor de Carabineros Mario Aurelio Treuber Heysen, el 7 de noviembre del 2002, en el fundo Santa Alicia, en Angol. Alex era parte de un grupo que participaba en la recuperación del fundo, reivindicando la pertenencia mapuche de esas tierras en manos de Forestal Mininco.

Corría el año 2002, se encontraba de presidente Ricardo Lagos, que en su periodo comenzaron los montajes contra mapuches, que vulneraban la legalidad, pero que fueron avalados por los partidos políticos y autoridades del régimen. En la Araucanía como jefe de zona se encontraba el general José Alejandro Bernales, que luego sería premiado por el gobierno el año 2005 cuando lo nombran general director de Carabineros. Incluso, luego de su muerte, como una exaltación de su figura en los medios de comunicación, el gobierno le daría el apelativo del “general del pueblo”. Con el paso del tiempo, se descubrió que tanto Ricardo Lagos como José Bernales eran corruptos, uno con el caso MOP-gate y el otro, usando el dinero del Estado para sus fines personales. Es este general quien dirige al mayor Mario Treuber, y son ellos quienes encubren el crimen en primera instancia. Recién con las investigaciones de rigor, el fiscal militar llegó a la certeza de que el disparo que mató a Alex fue hecho cuando no existía ningún peligro para los carabineros y que no debió haberse actuado de esa manera. Pero transcurrido un breve tiempo, la Corte Marcial retiró los cargos porque avaló el testimonio de Treuber, que argüía que le habían disparado y que el respondió. Todo eso llevó al sobreseimiento del caso. En el 2017, se reabrió la causa, ahora para ser investigada por la justicia ordinaria. Pese a las dilaciones con que la defensa trató de impedir el proceso, al final se ha condenado al policía como autor del delito consumado de homicidio simple.

La decisión del Tribunal Oral en lo Penal de Angol basó la decisión de condena «en la abundante prueba incorporada durante el juicio, consistente en los testimonios de los dos funcionarios de Carabineros que estuvieron presentes al momento de ocurrencia de los hechos, sumado a las declaraciones de los demás testigos, además de la prueba pericial, documental, material y otros medios, que ha permitido establecer lo esencial de los elementos fácticos de la acusación y la participación en calidad de autor del acusado en los mismos… Concurrieron hasta el fundo Santa Alicia, ubicado en la comuna de Angol, cuatro funcionarios de Carabineros pertenecientes a la 1° Comisaría de Angol bajo el mando del imputado, Mayor (r) Marco Aurelio Treuer Heysen, con motivo de una ocupación de las comunidades mapuches del sector. Al llegar al lugar, los funcionarios fueron atacados por los comuneros con piedras, momentos en los cuales fueron repelidos con el uso de gases lacrimógenos y balines de goma con el fin de ser dispersados. Posteriormente, al encontrarse el imputado en una loma del mismo sector, cambió la munición de su arma de servicio que portaba, escopeta marca Winchester, modelo 1200, calibre 12 mm, la cual se encontraba apta para el disparo utilizando munición Western Super X, la cual contenía postas de plomo de 8,4 mm aproximadamente cada una, estando a una distancia aproximada entre 70 o 100 metros de distancia de la víctima Edmundo Álex Lemún Saavedra de 17 años de edad, teniendo la preparación en el uso del arma y conociendo lo letal de esta, dispara en contra del adolescente impactando una posta en la parte frontal derecha de su cabeza. Producto de la acción del imputado, la víctima fallece el día 12 de noviembre de 2002, estableciéndose como causa de muerte ‘traumatismo encéfalo craneano abierto, por proyectil de arma de fuego, sin salida del mismo'».

La desidia de los políticos que han gobernado el país y su corrupción, han mostrado como la lucha mapuche fue usada una y otra vez como excusa para imponer medidas restrictivas, distraer a la población con el terrorismo mapuche y militarizar la Araucanía. Hoy cuando los políticos están desprestigiados y la burguesía está golpeada por el pueblo, siguen en la agonía tratando de distraer con “el problema mapuche”, apoyados por los medios de comunicación tratan de asociar una lucha de siglos con el narcotráfico y la delincuencia.

La justicia, nimia, para Alex llegó después de 19 años. En el intertanto el paco que le disparó no tuvo ningún problema para seguir subiendo de grados y llegar a coronel, lo que habla de que Carabineros sólo es una organización de criminales amparados por el Estado.

Tenemos que encargarnos de hacer justicia de verdad, no sólo en el caso de Alex Lemún, sino de todos los muertos de nuestro pueblo.