En marzo de este año el sexto tribunal oral en lo Penal de Santiago los había condenado como responsables del ataque incendiario y la destrucción de la estación del metro La Granja. Debido a que Carabineros a través del OS9 y la policía de Investigaciones, a través de la BIPE, los habían identificado como los autores del delito. En ese entonces, Juan Francisco González, jefe del departamento OS9, se autofelicitaba por su excelente labor de identificar a los culpables. Otros carabineros que participaron del caso fueron el capitán Nicolás Valenzuela Urzúa y el capitán Mitchel Cerda.
En abril, el mismo tribunal condenaba a 540 días de presidio menor en su grado mínimo a Jeremy Ramírez y a 800 días de presidio menor en su grado medio a Omar Jerez. Lo que en ese momento fue cuestionado por el Ministerio Público que quería que fueran condenados a 18 años de prisión.
En junio, La Corte de Apelaciones de San Miguel acogió un recurso de nulidad interpuesto por el Ministerio Público y los querellantes, el Ministerio del Interior y el Metro de Santiago, Por esta razón, se debió realizar un nuevo juicio, con ello perseguían subir las condenas a los imputados.
Hoy día, los imputados fueron absueltos del incendio del Metro La Granja. La Fiscalía Sur buscó anular el primer juicio y en este segundo esperaba subir las condenas, pero salieron trasquilados porque se estableció que las pruebas presentadas por los querellantes “generaban dudas” que no permitían relacionarlos con el incendio.
Lo que resulta alarmante, desde hace mucho tiempo, es la entrega de testimonios de la policía y “expertos” que inculpan a personas, y no se les castigue por manipular la justicia a su arbitrio. Junto a esto está la Fiscalía, que ex profeso trató de aumentar las penas para castigar políticamente a los manifestantes. Persecución y mentiras, son parte de montajes hechos no solo acaecidos por el 18 de octubre del 2019, si no que vienen desde muchos antes y se han normalizado como forma de reprimir y castigar al pueblo.