La lucha contra las AFP, la madre de las batallas.
«Desde los inicios, la frase que agrupó a los trabajadores y trabajadoras del puerto de San Vicente fue ‘Siempre Unidos, Nunca Más Solos’. Consigna que reflejaba el momento y la necesidad de volver a agruparse en función de demandas comunes.
Los orígenes del movimiento NO+AFP nacen del Biobío en los años 2012 aproximadamente. “En una primera instancia queríamos darle un golpe a las mutuales. Nos unimos y organizamos, luego comenzamos a crecer y conformamos una coordinadora de trabajadores. Nuestro trabajo se centraba en “La Madre de las Batallas”. Batalla mayor que significaba derrotar el sistema de AFP. Empezamos a trabajar el 2012. Recorrimos el país levantando organizaciones locales que sumaran al movimiento en contra de las AFP. Nos tildaban de locos. Que las AFP nunca dejarían de existir, nos decían. Y nosotros seguíamos. Nosotros armábamos las marchas”
“Los que aparecen en el Congreso gritando que esas movilizaciones fueron un gran logro, nunca estuvieron ahí. Eso fue una creación nuestra. Fue un logro de los trabajadores. El problema es que levantamos la demanda y no la desarrollamos. La dejamos en la mesa y vinieron otros weones y se la llevaron. Nosotros hicimos el desgaste físico. Fuimos nosotros los portuarios los que nos levantamos y nos organizamos junto a muchas organizaciones sindicales.»
“La intención era clara: impulsar un movimiento contra las AFP. Además de impulsar el nuevo sindicalismo, porque nos identificábamos mucho con las nuevas formas. Formar a nuevos dirigentes. Dirigentes que trabajen, que tus compañeros te vean trabajando igual que ellos. Haciendo turnos de noche o en vísperas de navidad. Eso hace que te crean. Está clarísimo que en el mundo político hay un desgaste de credibilidad, pero nosotros todavía tenemos la suerte de seguir contando con la confianza de los viejos, de nuestros compañeros de trabajo», sentencia Luis Neira.
“El mundo portuario vivió el 18 de octubre como algo propio porque nos sentimos parte de ese proceso.”
«Pienso que el levantamiento vino a marcar el término de un ciclo. El término de un modelo económico que ya no resiste más y esto tiene consecuencias para todos lados. Hoy la derecha tiene los medios de comunicación. Aquí no ha pasado nada por buena onda de la derecha, todo lo ganamos en la calle. En este proceso hay gente que perdió la vida, hay chiquillos que perdieron su vista y debe ser un proceso para poner fin y borrar una dictadura en la cual hasta ahora no ha habido justicia. No basta con tener un par de monumentos que te recuerdan a los compañeros caídos. Hay que corregir todo profundamente. Hay una deuda de la clase dominante hacia nosotros la clase trabajadora y para que una constituyente sea legítima y represente las luchas del pueblo», continúa Luis, «debe derribar el sistema».
«Para eso fue creada, para sacarnos del pinochetismo, del manejo de la derecha económica extremista. Por último, quiere decir que yo creo que la política tiene que existir, que hay un modelo que está agotado que ya cumplió su ciclo, que ya está dando sus últimos tiritones y mientras no muera, nosotros tenemos que seguir peleando. Ya se vio que si no avanzamos con fuerza y mediante la lucha, no vamos a llegar a ninguna parte. En marzo del próximo año, vamos a mirar para atrás y veremos a los compañeros que todavía están presos, que todavía no hay justicia a quienes perdieron la vista, ni tampoco para quienes perdieron su vida. Lo poco y nada que tenemos los trabajadores, lo hemos obtenido por la lucha. No conozco un gremio que diga que por la vía legal ha conseguido algo. Por ejemplo ¿cuántos años llevamos en democracia y todavía nadie les da una respuesta a los profesores por la deuda histórica?»
Lo que se viene
«Nosotros pensamos que es inevitable que se venga otro proceso de movilizaciones. Tiene que existir», asevera Luis.
«No puede detenerse, se viene otra gran revolución y debemos creer que somos capaces de terminarla. Tenemos que tener confianza en nosotros, en lo que podemos hacer. Tenemos que convencernos de que este modelo económico murió y debemos ser capaces de crear algo distinto. ¡Si esto ya no se resiste más! ¡Está haciendo agua por todos lados! Hoy estamos bajo una crisis generalizada y con el estallido social nos dimos cuenta que solo hay dos clases sociales, están los ricos y los trabajadores. Muchos trabajadores endeudados hasta el cogote que se creían clase media, se dieron cuenta de eso.”
“Nuestra lucha es por las demandas básicas,» continúa Luis. «Nuestro modelo debe incorporar la salud, la educación, la vivienda. No debiera existir producción que siga dañando el medioambiente. La lucha por NO+AFP debe continuar. Es una burla que un viejo que trabajó y cotizó toda su vida para su casa, para locomoción, para alimentación, para educar a sus hijos, para comprar zapatos, hoy termine con una pensión miserable que te da el estado y eso lo viva el 99% de los que jubilan. Si somos los trabajadores los que generamos el trabajo y las riquezas, somos nosotros los que debemos gobernar. Nadie tiene la receta, pero buscaremos una alternativa que sea más justa y tenemos la oportunidad de demostrarlo. Creo en lo que estamos haciendo y debemos creer en nuestras capacidades, basta ya de que vengan otros a resolvernos el problema a su pinta o nos digan lo que tenemos que hacer.»