Las contribuciones son para pagar contribuciones de 23 propiedades que les tienen embargadas en el marco de una investigación penal por el enriquecimiento ilícito del dictador a través de sus ex sociedades Belview International S.A. y Abanda Finance Ltd., creadas justamente para fondearse cuando le robaban recursos al Estado de Chile.
Resulta paradójico que los dineros que quieren los Pinochet estén en el Banco de Chile. Este banco, de la familia Luksic está siendo investigado por la Audiencia Nacional de España por “blanqueo de capitales y alzamiento de bienes de Augusto Pinochet”.
La investigación es resultado de un procedimiento impulsado por el abogado Joan Garcés, en nombre de la fundación española Presidente Allende, entre otros, representando a más de 20 mil víctimas de la dictadura militar.
Cabe mencionar para estos efectos, que según un estudio encargado por la Corte Suprema chilena, de los 21 millones de dólares (casi $16.500 millones) de la fortuna habida por Pinochet, solo 2 millones ($1.500 millones) serían limpios. Habría que ver también, a qué se refieren con que serían limpios, pero esa ya es harina de otro costal.
Volvamos a las chauchas. Los Pinochet necesitan solo $16 millones para pagar las contribuciones de las 23 propiedades que les tienen embargadas. Éstas, están avaluadas ni más ni menos que en $17 millones de dólares.
Según el escrito entregado a la justicia “no están en condiciones de pagar el impuesto territorial”. Una lástima. Podrían pedirle a sus amigos militares. Fuentealba por ejemplo, que tenía mucho cash ($2.980 millones) en la caja fuerte de las Fuerzas Armadas. Lástima que el ex comandante en jefe de los valientes soldados de Chile, al igual que el difunto y su familia, está siendo investigado por ladrón. Una pena, todos los amigos en problemas. ¡Vaya pillos ladronzuelos!