Piden 15 y 10 años de cárcel para el matrimonio Fuentealba-Pinochet

De las vacaciones 5 estrellas en Puerto Velero al centro penitenciario más cercano. 15 y 10 son las penas que pide la fiscalía para la parejita chic.

En la foto que más se repite en los medios, se ven tan elegantes. Ella sobre todo, una dama. Él, mira hacia arriba, al infinito y más allá. Con tantas lucas qué no podrían hacer. ¿Una casa, diez, 40? ¿Un yate, joyas para ella, un Audi en cuotas?. El Ministerio Público pide 15 y 10 años para el par de delincuentes Fuentealba y Pinochet.

Pinochet ella. No el dictador que se fue sin pagar por sus crímenes ni por todo lo que le robó al país. La “Lucía chica” o  Ana María Pinochet, esposa del ex comandante en jefe del Ejército, Juan Miguel Fuente Alba (2010-2014) y él mismo, están imputados por los delitos reiterados de malversación de caudales públicos y lavado de dinero.

Sí, el matrimonio que se ve tan elegante en esa foto que tanto circula en los medios. Para él, el fiscal José Morales de la Fiscalía Metropolitana Centro Norte, pide 15 años y para ella, 10. Además el fiscal pidió la confiscación de cinco propiedades  del matrimonio: una parcela en Chicureo, cuatro departamentos en las Condes.

En este caso, el dinero robado fue destinado además para la adquisición de un largo etc. de bienes y servicios, entre ellos, joyas, autos, viajes. Los dineros fueron robados de  los gastos reservados. En total fueron cerca de $ 3 mil millones entregados en módicas sumas anuales de 745 millones anuales, o sea, 62 millones mensuales. La parejita no se andaba con chicas.

EL dinero lo manejaban en efectivo, en una caja fuerte. El jefe de finanzas  del ejército sacaba y destinaba la platita de un lado para otro. No hay documentos que acrediten el traslado del dinero, ni cuentas bancarias. Era todo efectivo y las órdenes eran dadas verbalmente por Fuentealba al jefe de finanzas para que no quedar registro contable del robo.

Cabe señalar que Fuentealba ya se encuentra procesado por la jueza Romy Rutherford por la malversación de $19 millones debido al mal uso del avión institucional para trasladarse a Puerto Velero donde farreaba junto a familiares y amigos, entre 2010 y 2014.