La noticia recorrió los medios del continente como una bola de fuego. Había algo para todos los países, pero sólo un verdadero campeón: Sebastián Piñera. Según la encuesta de Ipsos, Chile es el país que mejor ha manejado la pandemia.
¿Pero quién lo dice? ¿La población de los países que viven el desastre sanitario provocado por el virus? Ningún pueblo puede estar contento. Sin excepciones, la situación es dramática. De hecho, América Latina es la región más golpeada por la pandemia en todo el mundo. Y vaya que ha golpeado.
¿Puede ser que la gente haya visto que las tasas de vacunación chilenas son muy altas? Porque eso es innegable. Chile, en efecto, es el tercer país en proporción de personas vacunadas con respecto a la población total. Es como el Mundial del ’62, entonces. ¿Será eso?
O quizás los encuestados se fijaron en los muertos que ha provocado la pandemia. Ahí, las estadísticas oficiales muestran que Chile va parejo con Brasil, Colombia, Ecuador, Argentina, México, Uruguay, Paraguay, pero diez veces más que Cuba, medido por fallecidos por Covid por millón de habitantes.
Bueno, es una encuesta sobre percepciones, no sobre datos reales. Pero, de nuevo ¿quién lo dice? ¿Será así?
Veamos otros resultados: ¿quién es el presidente en América Latina que tiene más aprobación en el continente? Los resultados son llamativos: Luis Alberto Lacalle, de Uruguay, 68%; Sebastián Piñera, 50%; Guillermo Lasso, de Ecuador, 47%.
Oye, pero ¡qué popular es Piñera fuera de su país! Nadie es profeta en su tierra, el pago de Chile, etcétera, concedido, pero… Aquí ya estamos, francamente, intrigados. ¿No habrá alguna confusión? ¿Se habrá construido bien la muestra? A ver, Ipsos, ¿qué onda?
La consultora nos lo dice, pero en la letra chica. “Base: 380 líderes de opinión de Brasil, Ecuador, Perú, Bolivia, Chile, Argentina, México, Colombia y 6 países de América Central y el Caribe.”
Y eso es. “Líderes de opinión”.
No le vamos a preguntar a Ipsos cuál es el margen de error o cosas así, porque para eso ellos deberían estimar cuál es el total de “líderes de opinión”, cómo los definen o si incluyen a los influencers de Instagram, por ejemplo. Tampoco vamos a consultar quiénes son esos “líderes” y en opinión de quién.
Para qué. Si ya sabemos que la encuesta es súper trucha. Lo único que preguntamos es lo siguiente: ¿cuánto cuesta que lo pongan a uno arriba?
Sólo por curiosidad.