Carabineros: única solución, disolución ¡ya!

Este viernes se hizo viral por las redes sociales el maltrato de Carabineros en contra de una periodista de medios independientes. Esto demuestra la vulnerabilidad de cualquier ciudadano frente a estos “servidores públicos de verde”.

Con el paso del tiempo, el poder del pueblo se hace cada vez más fuerte, pero esto no queda siempre reflejado en la vida cotidiana. Desde octubre del 2019, es evidente la arbitrariedad y los abusos de Carabineros, pero también de Investigaciones, la Armada, el Ejército y la Fuerza Aérea.

En cada manifestación, la represión actúa de la misma manera. No dejando que la gente se manifieste libremente, y buscan cualquier artimaña para detener y maltratar.

El caso de una reportera de Piensa Prensa que es atacada, es quizás menor en comparación, pero no es un hecho aislado. Día tras día se suman más bajezas a su larga lista de fechorías. Desde los altos mandos hasta el último que compone su institución, son malhechores. Los primeros, ordenan los crímenes y los segundos, los avalan y son cómplices. Una prueba al canto: el robo de dinero a los propios subalternos, el desvío de fondos del Estado, el maltrato clasista de los oficiales, los nexos con la delincuencia y el narcotráfico en poblaciones, donde éste se cobija alrededor de las comisarías, las detenciones arbitrarias, los abusos sexuales a mujeres, etc., etc.

Es evidente que organizaciones como Carabineros y otras, no pueden seguir existiendo en un nuevo sistema político. No basta con cambiarle el vestuario, el color de los vehículos, como lo hicieron al pasar de la dictadura a los gobiernos de la Concertación. No basta con que juren que van a ser más profesionales. No sirven las «capacitaciones en Derechos Humanos». El gran problema es que actualmente estas instituciones son una herramienta que sirve para mantener a la régimen político mediante el terror. Transgreden “legalmente” todos los derechos humanos; matan, torturan, violan y maltratan a las personas. Hay dejar claro una cosa: cualquiera de estos “funcionarios” podría se procesado ante la justicia internacional; y es de esperar que, ya pronto, existe en Chile una nueva justicia, que le aplique los castigos que se merecen.